Archivos para la categoría: Alicante en el Recuerdo

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Recuperamos una de nuestras secciones más queridas en Alicante Vivo: «Música para una ciudad».
Y, en esta ocasión, lo hacemos con uno de los temas más bonitos del gran Andrea Bocelli, tenor, musico, compositor y escritor italiano. Con su canción «Con te partiro», ilustramos una treintena de fotografías antiguas de Alicante, al tiempo que abrimos los comentarios para que nos contéis todo aquello que os trasmiten las imagenes.
Esperamos que os guste

Música para una ciudad (17)

Fuentes:
«MIRADAS INÉDITAS DE LA CIUDAD DE ALICANTE» (ED. Tivoli)
«MEMORIA GRÁFICA DE ALICANTE Y COMARCA» (Diario Información)

«ALICANTE.MIRADAS Y RECUERDOS» (Ed. Tivoli)
Fotografías propiedad de sus autores

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En 1979, se celebró el XXV Aniversario de la Caja de Ahorros Provincial de Alicante, como bien anunciaba un rótulo luminoso en lo alto de la Torre Provincial, en la Rambla de Méndez Nuñez (M. Arjones)

             

Fotografía aérea de Alicante y su Puerto. Aún podemos admirar el desaparecido edificio de la Comandancia de Marina
             
Las ciudades cambian casi a la misma velocidad que circulan los trenes por nuestras vías. Zona de la Ciudad de Asís, con la «curva maldita» a la derecha de la fotografía. Son muchas las personas que han perdido la vida mientras intentaban cruzar ese tramo. Hoy, las nuevas construcciones en San Blas han cambiado sustancialmente el lugar  (J.A. Gómez)

               

Antiguo grupo de operarias en el patio de la Fábrica de Tabacos

Fotografía de la Explanada de España, con el Club de Regatas en primer término. Al fondo, el «Meliá» en construcción.

         

Otra fotografía de la Explanada, en la que se adivina el Monumento de Canalejas 

(Extraídas del libro «Monografías Alicantinas»; Ayuntamiento de Alicante)
             

            
Postal de Ediciones Marimón,en la década de los años 20. Al final de Alfonso el Sabio aún no vemos la Fuente de Levante, inaugurada en la entonces Plaza de la Independencia en 1931. Es una fotografía inédita por lo original del encuadre y por descubrir rincones de la ciudad que no se han plasmado con frecuencia.

           

Fotografía de L. Roisin en la década de los años 20. Ya se ha desmontado el andén central de la Rambla. A la derecha aún puede verse el Convento de las Madres Capuchinas, sobre cuyo solar se levantó el Banco de España

      

Calle de San Vicente desde su arranque en Alfonso el Sabio. Vemos los raíles del tranvía, la Plaza de Toros al final y los eucaliptos en lugar de palmeras. Antiguamente era conocida como la «Calle de los Árboles». Postal de Marimón

    

Calle de Calderón con el tranvía circulando por una calzada bien pavimentada, con árboles en sus amplias aceras y con gente yendo y viniendo al Mercado de Verduras. El edificio en el que vemos el cartel anunciador albergaría años después el famoso «Julio el Madrileño».
                 
Simulacro de una batalla naval celebrado en Alicante, en 1862. (Fotografía de Jean Laurent)

            

Fotografía de Manuel Cantos realizada a finales del siglo XIX. Vemos el Paseo del Dr. Gadea desde el actual Parque de Canalejas. Las farolas y el tamaño de las palmeras nos indican la fecha aproximada.

                 

Calle de la Princesa, en una imagen de Hausser y Menet. Estamos a principios del S. XX, antes de 1912, fecha en la que dicha calle cambió su nombre por la actual Rafael Altamira

        

Panorámica de Josep Thomas de la actual Plaza de Calvo Sotelo (antes llamada Paseo de Reina Victoria y Paseo de San Francisco), con el recién restaurado busto de Eugenio Barrejón en primer término. 

             

Plaza de Gabriel Miró, uno de los Jardines Románticos de Alicante, aún sin los grandes ficus que hoy conocemos. Postal de Josep Thomas

            

Finales de los años 20. Vemos la Rambla, cerrada aún por el edificio de los Manero, con la Calle Liorna (después, López Torregrosa). Fotografía de Lucien Roisin

             

Principios de los años 60. Fotografía de Francisco Sánchez tomada desde la Avenida Dr. Gadea. El actual edificio de El Corte Inglés aún no ha empezado a construirse.
           
El Club de Regatas, visto desde el mar, a mediados de los años 60. El «Gran Sol» está a punto de concluirse. Fotografía de Francisco Sánchez
(Extraídas del Libro » Alicante: Miradas y Recuerdos». ED. TIVOLI)

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Momento de la despedida de Alfredo en el Tossal, justo antes de subirse en nuestra particular Máquina del Tiempo.

En un día tan especial como hoy, la Asociación Cultural Alicante Vivo no quería faltar a su cita con la Historia y la Suerte.

En este artículo, vamos a hacer un repaso, por primera vez en nuestra web, de todas aquellas ocasiones en las que «El Gordo» de la Lotería de Navidad ha visitado nuestra provincia desde sus inicios, allá por 1812.

Y os aseguramos que la experiencia no sólo es sorprendente, sino que no va a dejar indiferente a nadie

Para viajar al pasado, vamos a usar la misma Máquina del Tiempo que usó nuestro compañero Ángel L. Valero en ESTE artículo o la que sirvió de vehículo para nuestro libro «Relatos de una Ciudad Dormida».

Y ya nos puede contar Ángel qué avanzada tecnología utilizó en su día para hacer funcionar una máquina fabricada con dos mandarinas, diez Lacasitos y un imperdible, porque…. ¡Tío, funcionar, funciona de maravilla!

AÑO 1900
Nº 26.285

Las «Mandarinas del Tiempo» me dejan en las proximidades de la Calle Mayor. Como no veo zona azul., decido aparcar detrás de un carro. Los «Lacasitos» marcan las 12 del mediodía; estamos a 22 de diciembre de 1900. Por las calles de Alicante no se ve mucha celebración… ¡qué extraño! ¿Habré puesto Clementinas en lugar de mandarinas? No, son mandarinas del Mercadona, como me dijo Ángel. Mi móvil pita… no encuentra cobertura.

Voy a acercarme a preguntar a la Administración de Loterías de esta calle que, al estar en 1900, se encuentra en pleno centro urbano de Alicante.

-¿Don Inocencio, por favor?
-Servidor. ¿En qué puedo ayudarle?
-Estoy extrañado ¿Es que no celebra nadie haber sido agraciado con «El Gordo» de la Navidad?

-Ay hijo, qué desgracia. La primera vez que damos el Gordo y se llevaron el décimo a Villajoyosa. Un millón de duros que podíamos haber repartido y nada…

-Vaya, tenía entendido que les había tocado a los trabajadores de la Fundición de Aznar Hermanos y a algunas cigarreras…

-Eso se pensó al principio. Pero no. Le aseguro que se ha ido el billete a la Vila. Además, le puedo decir incluso quién se lo llevó: fue García Sellés, el juez municipal de Villajoyosa.

Decido revisar las notas que me ha escrito Juan José para este viaje:

«Juaaaaaaaaaaas©. Alfredo, estaba tan ocupado con mi amiga Sonia que se me había olvidado decirte en el Tossal antes de salir, que para un premio que toca en Alicante, se llevaron el décimo a Villajoyosa. El juez municipal, por encargo del comerciante de tejidos Sr. Orts, compró el billete el 10 de noviembre en nuestra ciudad, pero se lo llevó a La Vila. Y no sólo eso; además compró otro para el sorteo del día 20 de noviembre y también le tocó. Ya sabes que el dinero llama al dinero. Al final, el décimo premiado se repartió en participaciones entre gente muy humilde. Mira estos recortes de la época:»

Izqda: La Correspondencia de Alicante. 24 de diciembre de 1900.
Dcha: El Liberal. 23 de diciembre de 1900

Dedido pasarme por la «Plaza del Progreso» y comprar algo de uva para celebrar la última Nochevieja del siglo XIX; pero me ponen cara rara y me llaman «señorito». Poco después, caigo en la cuenta que en 1900 aún no existe la tradición de celebrar el Año Nuevo con uvas… y menos aún con Ramón García y su capa.

AÑO 1906
Nº 34.746

No me he trasladado muy lejos, ni en el tiempo ni en el espacio. Los «Lacasitos» marcan el mismo día pero 6 años más tarde. En los papeles de Juan José veo una poesía de la Pandorga Fu-Fu que no sé a qué viene (se lo preguntaré a la vuelta), la lista de su compra (el traidor come Caviar Iraní; cómo se nota que es el «presi») y unos datos sobre el premio Gordo de 1906:

«Pelao, acércate a la administración de loterías de la Rambla de Méndez Núñez y pregunta por D. Antonio Olmos»

Pues allá voy.

La Rambla está muy cambiada… o aún sin cambiar, mejor dicho. De hecho, en el rótulo cerámico aún pone «Calle de Méndez-Núñez». Paso por la recientemente rotulada «Plaza de Castelar» y me subo a lo alto del antiguo Paseo de la Reina. Desde allí diviso la administración.

-Buenos días señor Olmos
-Buenas, ¿desea algún décimo? ¡Acabo de dar el Gordo! Aproveche.
-Jajaja muchas gracias pero sólo quería que me contara algo sobre este premio. Esta vez sí que se ha vendido en Alicante ¿verdad?
-Pues sí. Además ya era hora… llevábamos jugando desde hace casi 3 años el mismo número. ¡Ya iba siendo hora de que nos tocara, fotre!
-Me han dicho que ha tocado en la tienda de tejidos del Port… deee la Plaza de la Constitución ¿no?
-Exacto, en la Aduaneta. Acérquese y verá la cara de felicidad de los dependientes. Desde allí se ha repartido a Tabarca, Villafranqueza e incluso Almería, ¡fíjese usted!

Tras despedirme del Señor Olmos me acerco al Portal de Elche donde se alza con su magnífica sillería la hoy desaparecida Aduaneta. «Tejidos la Nueva Aduaneta», reza el cartel. Se oyen risas en su interior. Leo los papeles de Juan José:

«Por desgracia, el gran corazón del Dr. Rico dejó de latir a una edad muy temprana. Viudo y sin…»


¡Menuda empanada mental tiene! Ya se ha equivocado de papeles y me ha metido el discurso de inauguración del busto al Dr. Rico por error. Por suerte, encuentro algunos recortes de prensa de la época con pinta de haber sido usados para envolver el bocata-caviar:

Izda: La Voz de Alicante. 23 de diciembre de 1906.
Dcha: La Voz de Alicante. 27 de diciembre de 1906

Intento acercarme con las «Mandarinas del Tiempo» hasta Tabarca, pero temo que los Lacasitos se deshagan en el agua. Quizá hubiese sido mejor colocarle M&M’s, que se derriten en tu boca pero no en tu mano…

AÑO 1937
Nº 01.165

Freno la máquina con el clip y miro el marcador de «Lacasitos«: hemos dado un salto de 31 años. España está en plena Guerra Civil, con un año y medio de conflicto. Se aprecian a simple vista los efectos de los bombardeos en Alicante. El último producido el día 10 de diciembre causó una víctima mortal. Alicante había sido cañoneada por el Cervera, el Canarias y el Baleares.

La gente está entusiasmada, debe ser porque les debe de haber tocado el Gordo, una de las pocas alegrías en tiempos de guerra. A ver le preguntaré al chico este que viene:

– ¿Qué ocurre? ¿Es por la Lotería?

– ¡¡Teruel!! ¡¡Teruel!! ¡Nuestras tropas han entrado en Teruel!. ¡Los facciosos huyen en retirada! ¡¡Viva la República!!

Decido viajar al día siguiente con las Mandarinas del Tiempo y me dirijo al kiosko de la Plaza de la Constitución (hoy, Portal de Elche). Me fijo en que el comercio de la Aduaneta en el que estado «hace unas horas» sigue abierto. El kioskero me informa que aún no pone nada del bombardeo naval de Dénia de esta madrugada. Le ha llamado su cuñada para decirle que están todos bien. Por lo visto, he tenido suerte de no venir a parar un día de bombardeo.

«Nuestra Bandera» publica en grandísimos titulares la toma de Teruel. Ahora entiendo toda la alegría. Me decido a comprarlo y me llevo también «El Luchador» para ver qué ponen del sorteo. Menos mal que Eusebio me ha dado un puñado de mondeditas de la época.

Izqda: El Luchador. 23 de diciembre de 1937
Dcha: Nuestra Bandera. 23 de diciembre de 1937

Vaya, otra vez Alicante se queda sin premio. Me vuelvo a acercar a la Administración de Loterías de la Calle Mayor.

-Buenos días ¿la señora Ibarrondo por favor?

-Soy yo, ¿es de la prensa?

-Más o menos. ¿Qué ha ocurrido con el Gordo de este año?

– Pues nada hijo, que no se ha vendido ni uno. Anteayer los devolvimos todos a Barcelona. Se ve que no gustó…

– Por Dios, qué mala suerte no?

-Chhhst, no diga eso a ver si le van a oir. Corren tiempos difíciles. Pueden pensar que es un pandorgo, aunque no le veo yo con cara de beato. Se piensan que no lo sabemos pero ahí al lado en la Rambla tienen una capilla clandestina. Entran y salen a cada momento. Pero bueno, ya sabe: ver ,oir y callar. Ah, y recuerde despedirse con un ¡Salud Camarada!

-Bueno, pues ¡Salud Camarada!


-Salud, chico

He preguntado por la calle sobre el sorteo de este año, y me han comentado que se ha celebrado en Barcelona. También me sorprende ver cómo ha bajado la cuantía del premio: de los 5 millones de mis anteriores paradas en el tiempo, al millón y medio de éste. Reviso los papeles de Juan José:

Sorprendente.

En 1936, el Premio era de 30 millones de pesetas; ahora, veinte veces menos. No creo que Juan José se haya equivocado… ¿o sí?; más bien temo que sea el efecto de la Guerra Civil. Entre sus papeles, también encuentro un décimo del año siguiente. En 1937, curiosamente, se la llama «Lotería NACIONAL. Sorteo de NAVIDAD« Pero… ¿los Nacionales no eran los de Franco? ¿Y la Navidad no es de católicos?

No entiendo nada….

Mira que es gafe. Para un billete que me adjunta Juan José, resulta que no es el premiado… Bueno, al menos el reintegro me lo llevo.

Entre la documentación para elaborar una investigación en el tiempo, encuentro un CD con varios archivos en PDF (Adobe Acrobat). Le he preguntado a un miliciano dónde podría encontrar un PC para sacar toda la información y llevármela en mi viaje. Pues bueno…, la que se ha liado por un pequeño error. El miliciano me ha contestado que el único CD que conocía era el Centro de Detención, y que con el Partido Comunista no se jugaba. Al final, se ha quedado con el disco porque me había oido decir en clave que tenían no-se-qué archivos en PDF: Poder De Franco o algo así. Al leerle la poesía de la Pandorga Fu-Fu, se ha quedado dormido. ¿Dormido? He aprovechado para huir. Ahora entiendo por qué Juanjorr me coló una poesía entre los papeles.

La próxima vez me traigo el portátil… aunque no sé si encontraré algún enchufe a 220V para cargar la batería… ¡Jopeta, que raros eran los antiguos alicantinos!

¡Anda. mira! Un puesto de altramuces. Tengo aquí más pesetas de Eusebio y quizá me sirven. Estoy muerto de hambre.

AÑO 1980
Nº 60.076

Pues vaya, cómo se ha puesto la de la paraeta de altramuces. Me ha dejado el ojo bonico… Total por darle dos pesetas con la cara de Franco, ya ves. Un anacronismo temporal lo tiene cualquiera… ¡Qué gracioso el Eusebio…!

Ale, le doy al clip y, accionando las Mandarinas del Tiempo, pego un salto de 43 años nada más ni nada menos. Los Lacasitos giran como locos…. decido parar de madrugada y guardar la máquina del tiempo en el aparcamiento subterraneo de la hasta hace poco llamada Plaza del Caudillo. Los nuevos rótulos bilingües de Plaza de la Montañeta llevan puestos año y medio.

«Alfredo, tienes que ir a la Estación de Autobuses y pillar el autocar a Almoradí, porque allí cayeron los 8.750 millones del Gordo en 1980. ¡8.750 millones nada menos.!»

«Próxima salida por andén 2 autocar destino Almoradí»

Aún no ha empezado el sorteo, así que creo que llegaré a tiempo a la administración. El Gordo, de 250 millones de pesetas, salió a las 11,42 de la mañanay cayó íntegramente en la administración número 1 de Almoradí, aunque fue repartido por varios pueblos de la Vega Baja.

El autobús me deja, curiosamente, en la Plaza del Generalísimo. Aquí no han llegado aún los aires de cambio por lo visto. Voy a tomarme un café en el Bar Requena, que hace frío. Reviso los recortes que me ha dado Juan José:

Información. 23 de diciembre de 1980

La Primera Cadena está informando que el Gordo acaba de caer en el pueblo. Voy a acercarme a la administración. Curiosamente el dueño del bar me acaba de invitar, por algún motivo que no me quiere revelar pero que intuyo.

Allí me entero que el club deportivo de Dolores ha vendido varias papeletas en el pueblo, que el Partido Comunista de Benejúzar había dado 500 millones de pesetas y que en Catral se habían repartido 350 millones.

Información. 23 de diciembre de 1980

Intento salir de la plaza como sea. Esta todo lleno de periodistas, personal de banca a la caza del millonario y hasta el alcalde que ha venido al lugar. La policía se decide a cortar al tráfico la Plaza del Generalísimo. Haciendo auto-stop me para un Seat 600 que se presta a llevarme hasta Alicante. Un viaje por nacional comodísimo, sí, sí…

AÑO 1987
Nº20.064
Información. 23 de diciembre de 1987

Después de perdernos por Europa con el 600 y acabar con la espalda destrozada, sigo las instrucciones de Juan José y me marcho a 1987:

«Aparca bien las Mandarinas del Tiempo y vete al Bar de la Hermandad de Legionarios, me meeeee©. Allí se vendieron muchas papeletas del 20.064. Estate atento al reloj Casio que te adjunto porque a las 10:52 ocurrirá algo muy curioso»

Pues nada, entro en el bar y me pido un bombón (no sé los cafeses que llevo «hoy»). Un momento, juraría que he escuchado el 20.064 pero no han dicho nada del Gordo ¿Se habrá equivocado Juan José? Este es capaz…

Se ha parado el sorteo. Algo ha ocurrido. El Casio empieza a pitar y sí, son las 10:52. Quizá Juanjo se refiera a ésto.

Tras llevar la tabla con los alambres ante el señor Mañez, se comprueba que el Gordo ya había salido y que por error no había sido cantado por la niña Gemma Llorente. Si no fuera porque la televisión del bar es en blanco y negro, diría que la niña está roja como un tomate.

Creo que en el bar aún no se han dado cuenta de que les ha tocado…. Decido salir y acercarme a la administración número 9 sita en la Calle de Carratalá, justo cuando llega el Renault 5 del Diario Información.

Entre el tumulto nos enteramos que a las loteras no les ha tocado ni un duro pero están felices por haber repartido tantos millones por el barrio.

– Pues fíjese que ayer aún quedaban tres décimos por vender del 20.064

– ¿A quién fueron a parar los décimos que han vendido?

– Uuuy muy repartido por todo Alicante y provincia. De aquí han comprado muchos décimos para hacer papeletas. Por ejemplo, los de la Telefónica de Ciudad de Asís se llevaron 25 décimos para 20 empleados. Imagínese, unos 700 millones a repartir. Los de Capisa, Pepito el barbero, la mercería de Maribel también… bueno, bueno… repartidísmo (risas)

En efecto fue muy repartido por todo Alicante: la Mercería Maribel, la tienda de Corberó y el taller mecánico, los tres de la Calle Pérez Medina, la barraca Tots volem festa, los colegios de Don Bosco y Enric Valor que se llevaron 1800 millones de pesetas. También se vieron agraciadas la empresa de Amaro González (400 millones), la Comandancia de la Guardia Civil (30 millones), el INE o la Mutua Unión Patronal entre otros.

Un representante de Baterías Tudor, Ángel García Zapater, sembró de millones los talleres y tiendas de varios pueblos de la provincia.

Información. 23 de diciembre de 1987

AÑO 1993
Nº20.064

Anda, si yo de este Gordo me acuerdo. Todos se pensaban que al apellidarme igual que el pueblo donde tocó, me habría correspondido algo… pero no.

Ni un duro.

Información. 23 de diciembre de 1993

Después de detener la máquina en el aparcamiento de la ladera del Castillo, reviso la carpeta a ver qué me ha puesto Juan José en las notas:

«Alfredorrr, como imagino que recordarás, en 1993 el Gordo cayó íntegramente en El Campello. Correspondió al número 47.884 que dejó 21.000 millones de pesetas en la provincia. Esconde bien las Mandarinas del Tiempo y pillate el autobús de línea C-1. En 1993 la línea de AUPLASA aún comenzaba en las puertas del Panteón de Quijano»

Vaya el C-1 ha llegado tarde, la gente salta de alegría a las puertas de la Administración número 1, en pleno centro de El Campello. Entre decenas de periodistas, grabadora de caset en mano, le pregunto a Antonio Calvo, presidente de la comparsa Jaume I:

-Sr. Calvo (con perdón) ¿Por qué eligió ese número?

-Pues Trini, la propietaria, me dio a elegir entre siete u ocho números y al final me decidí a coger este… no sé por qué… Para el del Niño del día 5 en cambio pues he pedido el 9. Así sin pensarlo. A ver si me toca también (risas)

-¿Cómo se enteró de la noticia?

-Me lo dijo un compañero y no me lo creía. Y al final mira, 30 millones para mí y otros 30 para mi hermano.

-¿Qué va a hacer con ese dinero?

-Pues por ahora irme al Seis Perlas a celebrarlo. Con borrachera incluida (risas)

Información. 23 de diciembre de 1993

Elkiko me ha dado una notita sobre el Gordo de este año:

«No sé si lo sabrás pero el Gordo del Campello coincidió con las matrículas alicantinas con series CK, CL y CM. Así que por casualidades de la vida los coches que se compraron los campelleros agraciados tuvieron matrículas CK (Campello Kilos), CL (Campello Lotería) y CM (Campello Millones). Ah, aprovecha para sacar algunas fotos de la inauguración de los cines Ana de la Calle Médico Pascual Pérez»
AÑO 1998

Nº 21.856

Información. 23 de diciembre de 1998

Estoy en Novelda, donde ha caído parte del Gordo. Concretamente una serie del 21.856. 300 milloncejos para el pueblo no está nada mal. Pero la noticia está Elche, donde han caído 1000 millones de pesetas pero de un 5º premio.

Cuando me dispongo a bajar de las Mandarinas del Tiempo, un Lacasito rojo parpadeante me indica que la temperatura del agua ha llegado a un nivel peligroso. Ángel podría haberle puesto un electroventilador al radiador de la máquina del tiempo. Qué chapucero…

Tras quedarme junto a la máquina a la espera de que baje la temperatura, decido dar un pequeño salto a 1999 y dejar descansar un poco el trasto este…

Información. 23 de diciembre de 1998

Mi móvil pita. Claro, ya hay cobertura de telefonía. Pero no aparece ninguna red de Vodafone. Será cuestión de esperar unos años.

AÑO 1999
Nº 65.379

Esta vez decido dejar descansar las Mandarinas del Tiempo en el aparcamiento de la estación de Renfe y pillo el cercanías con destino a Elche, tomando la precaución de quitarle el clip para que nadie me la robe. Que no se me olvide sentarme a contramarcha porque en San Gabriel invierte el sentido y así me toca de frente.

«Cercanías destino Murcia, Vía 2. Rodalies destinació Múrcia, Via 2»

Información. 23 de diciembre de 1999

Me bajo en la estación Elx Parc y enfilo hacia la Plaça de Baix. Si en 1998 Elche ya se llevó un 5º Premio, ahora le ha caído el Gordo, y además íntegro. Leo lo que me pone Juan José:

«Anda queeeee….. estos de Elche no paran de ganar millones. En 1980 parte del premio de Almoradí se fue para allá, en 1998 cayeron casi 2000 millones y ahora en 1999 se llevaron nada más ni nada menos que 43.500 millones de vellón. El mayor premio de la historia. Acércate a la administración nº 2 de la Plaça de Baix. Habla con la lotera, que se llama Mari Ángeles Quiles a ver qué te cuenta»

La encuentro enseguida dando botes de alegría y con un gorrito de Papá Noel en la cabeza.

-¿Se ha vendido todo o ha habido alguna devolución?
-Todo en ventanilla, todo (risas). Y creo que no se han hecho papeletas. Han sido todo décimos. Está muy repartido por el Raval y por los Palmerales. Ah, y a los de Telecinco que se han llevado un buen pellizco (risas)

-¿Alguna empresa de calzado se ha visto agraciada?

-Sí, sí también (risas). En Altabix, Carrús, Matola, la carretera del León le ha tocado a varias empresas. Ay qué alegríaaaa, y eso que a mí no me ha tocado nada…

Información. 23 de diciembre de 1999

AÑO 2006
Nº 20.297

Izqda: Información. 22 de diciembre de 2006 (Ed. Tarde)
Dcha: Información
. 23 de diciembre de 2006
Juan José me ha dejado una nota con un aviso escrito en letras grandes y con florecillas sobre las ies (qué hortera) que pone MUY IMPORTANTE:

«En estas fechas corres el peligro de cruzarte contigo mismo por la calle y además reconoceros mutuamente. Evita las calles por donde peudas pasar porque puedes sufrir alteraciones moleculares de gravedad, puedas acabar votando a Falange Española, Secretario de una Asociación Cultural y terminar peor que la Pandorga de Sardá. Por cierto, no sé si en Onil encontrarás mucha animación porque creo que se vendieron 100 décimos del Gordo. Si quieres, acércate a Alicante o Benidorm»

Chorradas…, decido pasar de Juanjo (como siempre). Tras birlarme mi propio coche (seguro que mi yo de 2002 ni se entera) me dirijo hacia la administración «La Década», la nº 1 de Onil y me encuentro poca animación. Pese a que tocan a unos 6.000 euros por habitante, la gente ha decidido quedarse en casa y no dar a conocer la cuantía de su premio. Pues vaya, después del viaje que me he pegado…

Decido bajar a Alicante, porque en la Administración número 11 de la Rambla de Méndez Núñez una inmigrante marroquí ha sido agraciada con 600.000 euros. La encuentro llorando en la puerta de la administración:

-Después de tanto… sufrimiento… 27 años de penalidades en España… aún no puedo creermelo.

-¿Que va a hacer con el dinero? – Sólo pienso en mis hijos, mis hijos. Tantos años luchando por saliradelante. Siempre he tenido la negra y ahora la suerte se ha teñido de blanco. Ahora… voy a retirarme del trabajo.

Entre lloros, Arima se abraza a Herminia Vallés, la lotera, que nos asegura que no tenía muchas ganas de dar el Gordo porque está algo delicada de salud y tanta entrevista y sobresalto la tienen alterada. Al girarme… ¡zaaaas!, me encuentro con Juan José, que no me reconoce, lógicamente. Lo que me faltaba: para una vez que viajo en el Tiempo, tampoco puedo quitármelo de encima

-¿Perdona ¿es aquí dónde ha tocado? -me pregunta Juan José Amores
– Mmmmm… sí.

-Es que soy del blog «Alicante en el recuerdo y en la actualidad» y me gustaría sacar unas fotos de lo que está pasando.

-(Carajo; Juanjo ya era un friki en el año 2006) Ah claro. Pasa, pasa… Por cierto, ¿no crees que tu blog tiene un nombre muy largo y que «Alicante Vivo» quedaría mejor?

-Pues suena bien sí. Se lo comentaré a Jesús Sanchez y Arturo Moreno; somos poquitos juaaaaaaaas©. Hasta pronto.

Información. 23 de diciembre de 2006

Aparco mi coche dos sitios más allá de donde me lo cogí a mí mismo, total mi yo de 2002 ni se dará cuenta jaja. Antes de irme, le pongo a mi yo de 2002 una nota en el parabrisas que pone :

«La bomba de agua está a punto de cascar. Le recomiendo que la cambie.
Firmado: un amigo anónimo».

Parecerá raro, pero en 2003 me costó la reparación 450 euros. Espero no cambiar con esta nota el futuro ni nada de eso…


AÑO 2007

Nº 06.381

Información. 23 de diciembre de 2007

Las Mandarinas del Tiempo no funcionan muy bien. Cuando he parado, los Lacasitos marcaban el 8 de marzo de 1844.

Por error, había ido hacia atrás.

Nada más parar, he oido disparos por la zona de la Explanada. Eran los últimos minutos de los Mártires de la Libertad. Casi me bajo y me acerco con la cámara, pero la gente me mira raro con las pintas que llevo, así que con todo dolor de mi corazón acciono el clip y me voy al 2007 a ver si consigo que me deje en el 22 de diciembre.

Este año ha tocado de nuevo en la Calle Mayor (admon. 23) y en el Centro Comercial Puerta de Alicante (admon. 37). No puedo perder mucho tiempo porque la máquina del tiempo no funciona muy bien. Me acerco a un cibercafé y entro en http://www.alicantevivo.blogspot.com y leo la primera reseña del blog sobre el Gordo de ese año (PINCHAD AQUÍ)

Información. 23 de diciembre de 2007

AÑO 2008
Nº 32.365


Información. 23 de diciembre de 2008

Las Mandarinas del tiempo apenas funcionan. Así que para ilustrar este año, me acerco al kiosko de la Rambla y me compro la Edición de la Tarde del Información. No puedo esperar más. Me tengo que ir.

Información. 22 de diciembre de 2008
(Edición de la tarde)


Envuelto en vapor, llego a lo alto del Tossal donde Juan José, Eusebio, Elkiko y Ángel Valero me esperan para recibirme. A lo lejos, se marcha el coche oficial de la Alcaldesa. El de Roque Moreno no lo veo. ¡Claro…. si los del PSOE no han querido acompañrnos, como siempre! Apenas he tardado dos minutos en volver según sus relojes. Aunque para mí han paso casi 20 horas sin apenas comer.
 

-¿Qué ha pasado? -le pregunto a Juan José.
-Nada. Que D. Miguel Valor y Dña. Sonia Castedo han aceptado nuestra solicitud para cambiar las calles con connotaciones fran…..
-Jodo, Juanjo. Me refiero a la Lotería de Navidad de este año. ¡Que no te enteras!
-Aaaaah. Pues nada. Ha caído un Quinto Premio en Callosa del Segura y otro Quinto en Petrer. Todo lo demás, pa´Madrid
-¿Qué me dices? Mala suerte hemos tenido. ¡Qué pena no tener en mis manos uno de esos billetes que he visto en mi viaje en el tiempo…..!

 
Ahora que lo pienso…. sí tengo uno de esos billetes. Seré pandorgo. En mi bolsillo guardé uno de los décimos premiados en el sorteo del año 1900. Aunque no sé si el Banco de España cambia aún reales a euros… ¿a cuánto estará el cambio?.

Cachislamarsalá.

Por lo menos, me queda la satisfacción de saber que a lo largo de la Historia, el Sorteo de Navidad ha despertado en Alicante tanta alegría e ilusión como ahora.
         
Y si bien no somos millonarios, me alegra saber que tenemos todos salud para seguir soñando el año que viene.

FELIZ DIA DE LA SEGURIDAD SOCIAL A TODOS

Por extraño que parezca, la Navidad llega incluso al corazón de nuestros políticos.

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«Quise ser arqueóloga para tocar la tierra con mis manos».

Solveig en el Museo Arqueológico Provincial. Ella es la segunda por la derecha

Son muchas las frases de Solveig Nordstrom que recordaremos para siempre los miembros de «Alicante Vivo». Y no sólo sus frases, sino también sus gestos, bailando y volando mientras habla…
Del mismo modo, son muchas las sensaciones y enseñanzas que nos transmitió a lo largo de la entrevista que tuvimos con ella en su humilde y cálido apartamento de Benidorm.
Aquella fría tarde otoñal pasó fugazmente ante nuestras vidas, cual suspiro de la Historia, entre sonrisas, abrazos y preguntas distendidas.
Por un momento, se nos olvidó que aquella mujer de 94 años, espiritual, risueña, inteligente, vital y sentimental, era la gran arqueóloga Sol (así quiere que la llamen sus amigos); la gran arqueóloga que con su valor y trabajo, salvó un importante fragmento de nuestra historia.
Solveig es historia viva. Es un empujón de vitalidad que nos alecciona en valentía e ilusión. Podríamos haber estado cientos de tardes preguntándole y hablando con ella sobre sus recuerdos, sobre sus pensamientos, sobre lo que ha aprendido de la vida… y nunca dejaríamos de aprender.
La vitalidad con la que te recibe y se desenvuelve te desarma y te lleva a su terreno para hacerte soñar con tiempos pasados, donde ella desenterraba e identificaba vasijas con sus propias manos.
Solveig está hecha del mismo material con el que se tejen los sueños y las ilusiones, aderezado todo con una gruesa capa de cariño y fraternidad.
Sus palabras llevan implícitas grandes dosis de humanidad y filosofía de vida, que ciertamente, le han ayudado a alcanzar casi la centuria con una sonrisa en la cara y una agilidad asombrosa.
Sol es, simplemente, alguien a quien siempre se debería recordar, no ya sólo por aprender de su espíritu y sus acciones, sino sobretodo, porque se merece ser eterna en nuestros recuerdos.
         
Solveig Nordstrom es una de nuestras grandes arqueólogas. Sin ánimos de olvidar o menospreciar a ninguno de los «otros» importantes (el Conde de Lumiares, el Padre Belda, Figueras Pacheco, Lafuente Vidal, Martinez Morellá, Pablo Rosser o el inolvidable Enrique Llobregat), nuestro corazón tiene que estar junto a ella…
Por muchos motivos.

«Al bajar del tren en la estación de Alicante, me compré por 1 peseta una bolsa enorme de dátiles. ¡Qué buenos estaban! Al caminar entre las palmeras, escuchando cómo me hablaba el viento entre sus hojas, hizo que me enamorara de esta tierra.»

Esta científica sueca, que un buen día se enamoró de la “terreta”, es uno de los personajes más grandes que tenemos. Sin duda alguna, debería tener un lugar de honor en la historia de la arqueología alicantina. Y no solamente por sus extraordinarios trabajos realizados en nuestra provincia como en la Albufera, San Fulgencio, Alcoy o Elche, sino tambien por su libro sobre la presencia cartaginesa en las costas alicantinas.

«Cuando todos pensaban que en esta tierra sólo había romanos e íberos, yo defendí la presencia cartaginesa. Y el tiempo me ha dado la razón»



Sin embargo, los alicantinos nos hemos olvidado un poco de ella o nos hemos limitado a ofrecerle un vacío y escueto homenaje en forma de placa a la entrada de Lucentum.

¿Quién es Solveig Nordstrom?
Nos tenemos que remontar a diciembre de 1955. En aquel año llegó a Alicante esta licenciada sueca “rubia de figura esbelta, con gafas estilo Marilyn y que habla correctamente el castellano”, que se disponía a realizar prácticas arqueológicas en nuestra provincia.
Cinco años más tarde, en abril de 1960, ya era una trabajadora incansable en el yacimiento de Guardamar del Segura. Pronto se uniría laboralmente al señor Lafuente Vidal, su gran mentor y amigo.
“Trabaja de forma incansable. En las excavaciones agarra la piqueta y no le rinden las horas. Resulta increíble. El entusiasmo la mantiene y su método de vida. No bebe ni fuma alimentándose única y exclusivamente de fruta y verduras, leche y alguna variedad de quesos”.

       

José Lafuente Vidal, su gran mentor

En el Museo Arqueológico Provincial (entonces en los bajos de la Diputación) se mostró como una eficaz colaboradora de Lafuente Vidal. Él mismo dijo de ella: «no es extraño que se lo sepa de memoria porque ha sido muy eficaz en su colaboración científica, donde ha llegado a redactar el plano del Museo, así como ha hecho muchos dibujos de orden explicativo y gráfico referido a los yacimientos arqueológicos de la provincia.”
En cierta ocasión, contó entusiasmada lo mucho que había podido sacar a la luz del Tossal de Manises, del que tan sólo se había excavado una octava parte de su perímetro. Pero también se entristecía al pensar todo lo que se iba a perder de nuestro valioso patrimonio cultural en cuanto fueran avanzando las obras de construcción en la Albufereta, ya que “los terrenos están vendiéndose por parcelas y sobre los mismos van construyéndose chalets, sin que mano alguna pueda detener esa anulación de valores que se hallan todavía sin descubrir.«
Y añadió Solveig, en clave algo misteriosa, “Claro, es cuestión de dinero y los arqueólogos somos pobres… ¡si yo pudiera hacer algo!
Y vaya si lo hizo.
En un día sin determinar (ya que los periódicos de la fecha estaban atenazados por la Ley de Prensa dictada por Manuel Fraga Iribarne), cuando las excavadoras de las empresas constructoras pretendían aplanar el Tossal, arramblando con los importantísimos restos arqueológicos depositados allí durante miles de años, para construir un hotel, Solveig, “amiga de gesto imprevisible” que diría Enrique Cerdán Tato, tuvo la valentía de enfrentarse a las autoridades franquistas de la época para impedirlo. Ni corta ni perezosa, se tumbó delante de los bulldozers de la época (máquinas excavadoras) y ante los medios de comunicación extranjeros que un amigo suyo había avisado previamente, impidió con su actitud que los intereses especulativos arruinaran el santuario de las civilizaciones que por Alicante se habían establecido. Es seguro que, de no haber sido Solveig ciudadana sueca, su actitud habría sido reprimida de forma inmediata por las autoridades, que prefirieron evitar un escándalo aún mayor del que ya se estaba produciendo.
Después de esta paralización, Solveig consiguió que el Ministerio de Educación español comprara los terrenos sobre los que se asentaban los restos, impidiendo de este modo la desaparición de la ciudad íbero-cartaginesa-romana.
Solveig Nordtröm se estableció posteriormente en Benidorm, donde aún tiene su residencia. En el terreno social, Nordström colabora con el Grupo de Estudios Espíritistas Allan Kardec, siendo impulsora de la difusión de este movimiento en su país de origen.

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Hola, Solveig. Nuestra primera pregunta es casi obligatoria… ¿Cómo tenemos que llamarte?
Reconozco que mi nombre puede resultar complicado. Todos mis amigos me llaman «Sol». Por lo tanto, «Sol» está bien. Así me conocen desde la India hasta en Brasil
         
Del mismo modo, Sol, también nos gustaría que nos dijeras como debemos llamar correctamente el lugar que salvaste. ¿Tossal de Manises o Lucentum?
Lucentum, claro. El Monte Tossal es el cerro donde se asienta la gran urbe de Alicante: Lucentum. (Es algo parecido al Castillo de Santa Bárbara y el Monte Benacantil)
¿Es cierto que habla 14 idiomas?
Sí, es cierto. Aunque no todos los manejo a la perfección, puedo entenderlos.
¿Incluso sanscrito?
Sí. He trabajado buena parte de mi vida como intérprete, traduciendo libros de Sueco, Francés, Portugués e Indio.
Una mirada al pasado, Sol. ¿Quién eras antes de venir a España?
Nací en Estocolmo en 1923. Era una niña alegre, divertida y muy estudiosa. Me encantaba bailar y la lectura. Aunque tengo los dos tímpanos perforados desde los 6 años, esto nunca fue un impedimento para estudiar Literatura en la Universidad de Estocolmo.

¿Literatura? Pero, ¿no estudiaste Arqueología Clásica?
En un primer momento, hice la carrera de Literatura. Sin embargo, cuando hice mi tesis sobre la escritora Selma Lagerlof, no la aceptaron porque decían que «ambas éramos muy espirituales». Por entonces me enfadé tanto, que decidí matricularme en Arqueología Clásica, donde daba clases un profesor que me gustaba mucho y poder estudiar, así, el Latín y el Griego.
¿Qué le hizo venir a España? Es decir, ¿qué pudo motivar a una sueca un pequeño país del Mediterráneo?
La ilusión de todo buen arqueólogo es viajar a Grecia y Roma, y excavar allí. Aunque muchos arqueólogos no han cogido una piqueta en su vida, yo quería dejar los libros y excavar la tierra con mis propias manos. Aunque decían en Suecia que España no era un país interesante por su dictadura franquista, yo sabía que la historia del Mediterráneo estaba incompleta si no estudiábamos este país.
¿Y qué hizo? ¿Coger las maletas y ya está?
Así fue. Primero viví gratis en Madrid, a cambio de dar clases de Francés a la dueña de una casa. Cuando tuve dinero ahorrado para el tren, me vine a Alicante
Háblemos de esa leyenda sobre el idioma castellano.
¿Cómo lo habéis sabido? (risas) Es cierto. En el tren de Madrid-Alicante, me senté junto a unos chicos que hablaban español. Lo primero que aprendí en castellano fue un poema de Gustavo Adolfo Bécquer. Enseguida pude hacer un paralelismo entre el Latín clásico y el castellano, por lo que lo aprendí muy facilmente. Recuerdo a mi llegada a la Estación de Alicante que compre una gran bolsa de dátiles por 1 peseta, y que empecé a caminar por las calles comiendo dátiles y escuchando el viento entre las ramas de las palmeras. ¡Quedé enamorada! Parecía que las palmeras me hablaban. Entonces supe que iba a amar esta tierra siempre.
¿Cómo fueron aquellos primeros momentos en Alicante?
Fue una nueva vida. Me alojé en la «Pensión-Bar Consuelo», junto al Mercado Central. Un día me acerqué al Museo Arqueológico Provincial, que por entonces estaba en los bajos de la Diputación. Todo lo que había expuesto era muy bonito. Conocí a Francisco Figueras Pacheco y a Lafuente Vidal, que habían trabajado juntos. Lafuente Vidal me preguntó si había estudiado arqueología y si conocía el Latín y el Griego. Yo le dije que sí, y él me respondió: «Yo te enseñaré muchas más cosas».
Lafuente, Pacheco, Belda, Lumiares…. ¿La arqueología es cosa de hombres?
Noooooo, ni mucho menos. Yo no fui una pionera en nada. Había (y hay) tantas mujeres preparadas para la Arqueología como hombres. Sí es cierto que me controlaban mucho las autoridades de entonces: no me dejaban llevar bikini, me preguntaban si era cristiana… Incluso el director del Museo me perseguía a todas horas para que me quitara los pantalones cortos. Decían que una mujer debía llevar falda
Sombreros, látigos, Templos Sagrados… ¿La arqueología es tan bonita como la pintan?
Es muy bonita, por supuesto. Pero también es muy dura. Durísima. No sólo por el trabajo de campo excavando día y noche, con Sol y frío, sino por lo mucho que hay que estudiar. Sin embargo, yo siempre he querido tocar la tierra, vivir. Cuando cogía una vasija o un tiesto, pasaba la mano con los ojos cerrados, al igual que Figueras Pacheco, y sentía sus vibraciones. Había algo místico, espiritual…. Muy difícil de explicar.
¿Cuáles fueron sus trabajos antes del Tossal de Manises?
Visité todos los Museos de España. Pero me maravilló la arqueología de Elche. Alejandro Ramos Folqués era un enamorado de su trabajo. Allí pude vivir trabajando en el Museo y dando clases de ballet a la hija de la dueña de un bar.
Recuerdo con simpatía muchos domingos por la mañana, cuando iba a La Marina con Felix Rodriguez Casanova. Él era un gran constructor y me enseñó a montar vasijas cuando nadie lo hacía. Era un trabajo altruista, hecho con todo el cariño y amor hacia la arqueología. Ahora miro hacia atrás y pienso en el dinero que dejé de ganar, pero a mí me movían intereses más espirituales.
Alcoi también fue maravilloso. Mientras hacía las excavaciones me trataban como a una hija. En España siempre me han tratado muy bien, y yo siempre la he defendido. Cuando regresaba a Suecia y hablaba de mis trabajos, allí nos criticaban. Yo nunca lo permití. Estaba muy agradecida a este país.
¿Por qué la criticaban en su país de origen?
Creo que todo era culpa del Gobierno imperante en España. En Suecia me dijeron una vez que una Tesis en español no era válida. Tenía que estar escrita en un «idioma civilizado», como si el español no lo fuera, aquello me enfadó muchísimo, por lo que tenía que traducirlas al Francés. Uno de mis sueños ha sido abrir colaboraciones entre ambos paises, pero en Suecia la arqueología española no interesaba lo más mínimo.
Una mujer frente a las excavadoras… es obligado que nos cuente con detalle todo lo ocurrido aquel día.
Lo recuerdo como si fuera ayer. Estaba sentada en una piedra a la entrada del yacimiento del Tossal de Manises cuando escuché el sonido inconfundible de las excavadoras y buldozers. Era obvio que venían a destruir la maravillosa Lucentum para edificar viviendas. La primera de ella era conducida por un chico muy guapo. Cuando le pregunté que querían me respondió : «tenemos orden de quitar esta basura». Me quedé horrorizada. «No vais a hacer nada», le respondí yo. Discutimos acaloradamente y, al darme cuenta que iba a entrar dijera lo que dijese yo, me tiré al suelo delante de la excavadora. El chico se asustó y paró la máquina. Luego comenzó a llegar mucha gente: políticos, periodistas españoles… Pero mi gran amigo y abogado Jaime Pomares Bernat decidió avisar a las embajadas y a la prensa extranjera, que por entonces eran más independientes. Gracias a eso, pronto se declaró Monumento Histórico y nunca más lo tocaron.

En este vídeo, Solveig Nordström nos cuenta en persona el momento histórico en que detuvo a las excavadoras y salvó la ciudad íbero-romana de Lucentum de la desaparición.

Entonces, ¿no cree que la construcción masiva de la Albufera haya dañado restos enterrados?
Estoy segura que no. Tras el incidente, vallamos enseguida el perímetro del yacimiento y levantaron los edificios fuera de él. Intentamos sacar deprisa y corriendo todas las piezas que había allí. Creo que lo conseguimos. Es posible que se trate de una leyenda urbana, lógica cuando te asomas a lo alto del cerro y contemplas cómo los edificios casi rozan el yacimiento.
En Alicante, mucha gente le está eternamente agradecida por la valentía que tuvo. Gracias a su aplomo, nuestros hijos y nietos van a poder contemplar los restos de nuestro pasado. ¿Qué se siente al haber entrado en la Historia por la puerta grande?
¡Qué me dices! Si yo no hice nada. Tan sólo me enfadé al darme cuenta que iban a destruir toda aquella maravilla. Yo me siento como un sencillo pajarito. Lo dijo Santa Teresa de Jesús: «yo soy un pequeño gorrión en el tejado»
Pero sabías que aquello que protegías era muy importante.
Sí, por supuesto. Figueras Pacheco y Lafuente Vidal ya sabían de antemano que Lucentum era algo muy grande. Pero en aquel momento, yo sólo quería protegerlo, sin pensar en valores futuros.
¿Qué hizo después de abandonar la arqueología activa?
Me vine a Benidorm. Aunque no lo creáis, ganaba más dinero bailando que excavando. Una excavación es una obra muy grande y cara, por lo que las autoridades preferían abaratar costes quitando personal. En Benidorm hice de traductora para un importante médico esteticista. Sus pacientes eran extranjeras y yo les facilitaba la comunicación. Incluso llegué a ayudarle a sacar sangre y operar. Este doctor fue quien me ayudó a buscar piso: este mismo ático donde hoy vivo, iluminado y cerca de mi amado mar Mediterráneo.

¿Por cuál de todas sus facetas profesionales le gustaría que le recordaran dentro de 200 años?
Creo que por todo lo que he hecho por los niños pobres de Brasil. La infancia es la etapa más importante del ser humano y nunca he podido soportar ver sufrir a los niños.

Esta pregunta se la hacemos a todos nuestros entrevistados. ¿Un acontecimiento histórico que nunca debería haber ocurrido?
Aunque no me gusta ninguna, hay algunas guerras que son especialmente dramáticas. Todas las de Alejandro Magno fueron horribles: matanzas, mutilaciones, violaciones…. Para mí, él nunca fue «grande»
¿Y un acontecimiento para recordar?
El nacimiento de Jesús de Nazaret
¿A qué momento del pasado le gustaría regresar tan sólo por unas horas?
Creo que me gustaría especialmente ser alumna de Jesús por unas horas y caminar a su lado.
Danos tu opinión de algunos colegas de profesión. Por ejemplo, ¿el Padre Belda?
Conmigo siempre fue muy simpático…. a pesar de que nunca consiguió que cambiara mi forma de vestir. Por desgracia, vivió y trabajó en una época en la que la arqueología no era nada profesional y sólo destinada a la gente rica. Hoy no podemos acusarle de todo lo ocurrido.

¿Figueras Pacheco?
Era un científico de verdad… Un arqueólogo inmenso. Sabía que su ceguera era un gran impedimento para él, pero gracias al tacto y a su sexto sentido, sabía diferenciar y datar con exactitud piezas de miles de años de antigüedad. Siento una gran veneración por él.
¿Y Lafuente Vidal?
Mi maestro y el sabio más grande entre los arqueólogos. Erudito de las lenguas clásicas, en su tumba tiene una inscripción que dice todo sobre su grandeza como arqueólogo: «Yo hice lo que pude. Otros sabrán hacer mejor las cosas». Esa humildad es la base del buen científico
¿Le gusta el Alicante actual?
Algunas cosas me siguen gustando como antaño: la Explanada, las palmeras, la Iglesia de Santa María…. Otras, no tanto.

¿Y el trabajo de la Diputación en Lucentum?
Ha sido un trabajo excelente. Lo han dejado muy bonito.
¿Tiene «Sol» una calle en Alicante?
No, por favor. ¿Por qué debería tenerla? Yo no hice nada. Tan sólo trabajé haciendo lo que me gustaba lo mejor posible.
Pero, ¿le gustaría que «Alicante Vivo» pidiera al Ayuntamiento una calle a su nombre?
Bueno, claro…. Pero mi nombre es muy complejo. Solveig Nordstrom… Quizá si la calle se llamara «Sol».

         

               
Sol es, aunque ella lo niegue, una heroína para los arqueólogos modernos. Sentados sobre el suelo a su alrededor, en el minúsculo apartamento hay excasos muebles, nos embelesa su forma de hablar y sobre todo esa mágica forma de mover las manos que hablan casi más que ella , sin duda parte de su magisterio de danza, y nos dicen cosas en ese idioma universal de la elegancia de esta bella mujer. Transmite Sol un amor hacia todo que no cabe en un artículo. No pude evitar cogerla de la mano y sentir estar tocando el barro envejecido de un vaso ritual de la diosa Tanit, la tierra misma entre las manos. Es Sol, sobre todo, una mujer espiritual y desde aquel viaje a la India con su compañero Gunnar su interés por la espiritualidad la ha llevado a un profundo conocimiento del mundo espiritista. Sobre una de las paredes un retrato del espiritista frances Allan Kardec del que Sol ha traducido varias de sus obras. Como dice de ella la Sociedad Vegetariana-Naturista de Valencia «Su aproximación a los fenómenos post-mortem en esta etapa de su vida y sus contactos a nivel inernacional hacen de Sol el arquetipo más parecido a una auténtica maestra espiritual en occidente«
Sol , ¿cómo se hace ese viaje de la arqueología activa, con las manos en la tierra, a la ciencia de lo no tangible, al espiritismo ?
Bueno es algo normal. Cada vez que desenterrábamos un cuerpo lo veíamos rodeado de útiles, abalorios, incluso juguetes de barro. Aquello me hacía pensar en la espiritualidad de todo aquello, en que el otro mundo siempre ha existido.
Sol no se despide con un adiós sino con un hasta pronto que tomamos al pie de la letra. Hay experiencias en la vida de las personas que quedan grabadas como las pinturas en las vasijas de otros tiempos. Esta tarde es una de ellas.

Agradecimientos:
Emilio Soler y el Diario Información por la amabilidad prestada a la hora de ajustar datos de Solveig Nordstrom

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Artículo de JOSÉ LUIS LURI

            

Grabado de Alicante, desde el Puerto. 1844

               

He leído, con sumo gusto y por segunda vez, la magnífica obra de Gerardo Muñoz Lorente: “Refugio de Libertad”, Equipo Sirius 2006, en la que narra los tristes sucesos acaecidos en nuestra ciudad durante la Rebelión republicana de 1844. Como la lectura es la madre de la conjetura, he terminando por acuñar dudas para poder compartirlas con mi buen amigo Moisés Davia, -hijo del que fuera brillante director de nuestra banda municipal y compositor de la Plegaria a la Santa Faz- y en ello andamos los dos, enfrascados en la más fraternal de las grescas. ¿Dónde fueron ejecutados el 8 de marzo de aquel año Pantaleón Boné y el resto de los Mártires de la Libertad?
            

Grabado de Alicante, a vista de pájaro

     

Gerardo Muñoz, en la línea de los cronistas alicantinos del XIX, sitúa el lugar de los fusilamientos “en el malecón”. Observando la pintura anónima de las ejecuciones que creo que se encuentra en nuestro ayuntamiento, hemos tomado como referencia el ángulo que muestran la torre y la cúpula de San Nicolás. Si damos veracidad fotográfica a la imagen, podríamos localizar el lugar de los hechos en las cercanías del antiguo Hotel Carlton y pie de la Rambla. Un dibujo publicado en la prensa inglesa de la época, ofrece una situación contradictoria pues coloca a los ajusticiados frente a un muro, con los fusileros a sus espaldas y prestos a la descarga. Quizá tan sólo nos hallemos en este caso ante una imagen idealizada.
                 
Fusilamiento de Pantaleón Boné

          

Un tercer instrumento que hemos manejado en nuestra investigación es la extraordinaria fotografía de nuestro puerto, realizada por Laurent en 1858. Si observamos en ella el lienzo de muralla que da al mar, podremos comprobar que éste se encontraba a escasos metros de la escollera; parece que el único muelle de carga y descarga de nuestro puerto era el que conducía al faro.

El grabado de la época de Alfred Guesdon, Alicante a vista de pájaro, también parece mostrar este largo tramo de muralla junto al mar, aunque la imagen no es muy clara.
                  
Alicante amurallado, en 1858. Fotografía de Jean Laurent

         

Moisés es de la idea de que el malecón alicantino lo constituía un gran espacio abierto intramuros, al menos en aquellos años, y que el actual paseo del Conde de Vallellano y el vial colindante, fueron ganados al mar. Los planos de la ciudad de 1851 y 1853, da la impresión de que recogen el proyecto de un nuevo malecón, no la realidad física del entonces existente. Por lo tanto, de ser cierto su punta de vista, Boné y los suyos no fueron ejecutados frente al mar.

Mi amigo me va llevando al huerto y yo me resisto.
                
¿Pueden los colegas y habituales de Alicante Vivo aportar algo para mi defensa?
                 
Seguro que sí.
             

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Noticia publicada en el Diario Información en la que la redactora, Clara R. Forner, hace un pequeño repaso histórico al edificio. ¡¡Gracias!!

            

LA HISTORIA DEL 19

La historia vuelve a repetirse. Han pasado casi cincuenta años desde que el despegue de la economía alicantina empezara a mudar sus espacios representativos por otros nuevos más acordes al momento de despegue económico que se empezaba a gestar. Y con el cambio de escenario, poco a poco fueron siendo sustituidos los actores. Actores que habían permanecido en la escena urbana desde hacía décadas, y que al cabo de unos años sólo podríamos rememorar con la ayuda de viejas fotografías que simplemente nos permitirían recordarlos en blanco y negro, difuminadas en la memoria por la pátina del tiempo.
               
La historia de este despegue tuvo como primer signo visible la construcción de la Torre Provincial, como así fue llamada casi espontáneamente. De controvertida gestación, fue inaugurada en 1960 como símbolo del nuevo Alicante que se desperezaba tras la larga pesadilla de la posguerra. Tras de sí, un cambio en la ordenación de su entorno que acabaría para siempre con el carácter de la Rambla como calle salón.
                 
La historia y sus ciclos. Ciclos con subidas y bajadas, con avances y retrocesos, según los juzguen los ojos que los contemplen. La pujanza económica se traduce en nuestra ciudad por sustitución y rendimiento inmediato, aunque no siempre óptimo, de lo que se considera viejo y obsoleto, así como por cambios en los usos y costumbres. Sólo en esta calle, los almacenes El Aguila, el Cine Avenida, La Ciudad de Roma y muchos otros, han desaparecido.
          
En el edificio estuvo establecida la bodega «Casa Luna», establecimiento fundado en 1848 por Juan Bautista Luna. En 1960, se transformó el negocio convirtiéndose en la Cafetería Luna hasta 1998, en que se vendió. En el ángulo superior derecha de la última foto, se puede ver un fragmento de las letras de la marquesina del vecino Cine Avenida.
          
Durante diez años, el edificio estuvo ocupado en su totalidad por esta tienda de moda, hasta que cerró a mediados de 2008. Fotografía gentileza de J.Castro.

        

La historia, o el curso de la misma, nos ha legado en este espacio, hasta la fecha, sólo tres edificaciones pertenecientes al periodo de finales del siglo XIX: El edificio del Banco Popular, la llamada Casa del Ascensor y el situado en el número 19 de la vía dedicada al insigne marino. Y decimos hasta la fecha, porque sobre éste último vuelven a planear, tras unos meses de hechos y desmentidos, de cambios de uso y posible catalogación, las sombras de la piqueta. Un edificio cuyo solar, una vez libre de polvo y paja, parece ser que será objeto de la construcción de una discoteca vertical, qué curiosa coincidencia, hoy trocada en bar-cafetería, leve matiz, sutil movimiento, para ajustarse a la normativa municipal. Y es que parece ser que sí: que antes de que el nuevo PGOU vea la luz, antes de su largamente esperada aprobación, quizá en las próximas semanas el historicista edificio azul celeste será finalmente demolido acabando sus días con los de este 2009. Ni la proporcionada fachada, ni sus antepechos forjados, ni sus relieves y detalles, ni siquiera su colorido alero volado de madera y azulejos serán capaces de impedirlo.

        
Ficha del edificio del Catálogo de bienes protegidos del nuevo PGOU de Alicante
Estado actual del edificio.
           
 
          
La historia de La Rambla quizá no tenga un final feliz. Porque sigue sin encontrar su destino, y porque a Alicante no parece importarle que su arteria aorta presente signos claros de colapso urbano. Hace tiempo que perdió su carácter comercial; sus abandonadas plantas bajas y locales otrora comerciales dan fe de esta circunstancia. Ha dejado de ser atractiva para los negocios bancarios, para las aseguradoras, para las sedes sociales de las empresas de la provincia… ni siquiera lo es para las inmobiliarias, una vez cumplidos los afanes de depredación de su maltrecho suelo. Pero quizá sí siga siendo un fiel reflejo de esta ciudad y las fases por las que va pasando, evolucionando o involucionando, trasmutada hoy en un escaparate de franquicias de comida rápida, salas de juego y locales de ocio nocturno.
Fotos de la Bodega Casa Luna, por gentileza de la Foguera de La Rambla.
Muchas gracias también a todos los que me han ayudado a escribir e ilustrar el artículo.

>Artículo Anterior:
Nuestros ilustres en el recuerdo (I)
  

José Gutíerrez Carbonell (1924-2002), trabajó en el estudio de Daniel Bañuls y estudió Bellas Artes en Valencia. Relacionado con el mundo de las Hogueras, es autor de una importante obra de carácter religioso, popular, alegórico y conmemorativo.

          

Xavier Soler (1923-1995), tras estudiar farmacia en Granada, irrumpe con fuerza en el panorama artístico alicantino de los cincuenta. Su obra (bodegones, paisajes o interiores)- se caracteriza por un cromatismo feliz y por un auténtico virtuosismo gestual, especialmente en sus gouaches (BASILIO F. MARTINE,AMA).

          

Eusebio Sempere (1923-1985), ante el Museo de la Asegurada, inaugurado en 1977, que alberga la Colección de Arte del Siglo XX donada por el artista a la ciudad. Éste es uno de los hechos culturales más importantes acaecidos en Alicante, a pesar de las dificultades posteriores que han gravitado sobre el proyecto museístico (AMA).

    

Juana Francés (1924-1990), Arcadio Blasco (Mutxamel,1928) y el escritor y crítico de arte Ernesto Contreras, en La Bonalba. La obra de estos prestigiosos artistas, junto con la de Sempere, ha conseguido una amplia proyección más allá de nuestras fronteras (Foto publicada en el catálogo de la Exposición homenaje a Juana Francés,1995).

         

El escultor Adrián Carrillo (1914-1979), formado en el taller de su padre, Miguel, y en el de Daniel Bañuls, llevará su obra desde el clasicismo mediterráneo hasta la abstracción geométrica en los setenta.Realizó encargos y relieves para Obras Públicas, Junta de Obras del Puerto, vestíbulo del Hotel Carlton y otros edificios, además de estatuaria eligios. Aquí aparece modelando un retrato de Óscar Esplá (Sánchez, AMA).

          

Daniel Bañuls Martínez (1905-1947), cuya obra más conocida y admirada es la Fuente de Levante (1930), en la Plaza de los Luceros, con motivos decó y orientalizantes, que se ha convertido en una de las imágenes más emblemáticas de la ciudad (SÁNCHEZ, AMA)

          

Vicente Bañuls Aracil y Rafael Altamira Crevea. Bañuls (1865-1934), pensionado en Italia, es el gran escultor que marca la transición al siglo XX. Es autor de las estatuas del Monumento a Canalejas, del Monumento a los Mártires de la Libertad, de la Fuente de la Plaza de Gabriel Miró y de las obras a Chapí y Campoamor.

          

Heliodoro Guillén (1863-1940) completó su formación en Madrid y Roma. Catedrático de Dibujo, en su obra se observa la evolución desde un arte argumental, propio del siglo XIX, hasta un acercamiento mucho más libre a lo propiamente pictórico, a través de sus paisajes (AMA)

       

Adelardo Parrilla (1876-1952), discípulo de Lorenzo Casanova, fue un pintor de raigambre popular y realista, autor muy celebrado por sus bodegones (SÁNCHEZ, AMA)

         

Emilio Varela Isabel (1887-1951), discípulo de Sorolla en Madrid y excelente pintor, fue el creador del paisaje alicantino. Perteneció a la gran generación de intelectuales y artistas de los años veinte y treinta, la del Ateneo. El pintor, autor de numerosos autorretratos, es objeto de un intenso homenaje luminoso (SÁNCHEZ, AMA)

           

Francisco Pérez Pizarro (1911-1964) fue dueño de un lenguaje pictórico valioso que puso al servicio de una honda interpretación del paisaje cercana al expresionismo. A finales de los cincuenta la experimentación matérica le conduce al informalismo, convirtiéndose en uno de los pioneros de la abstracción lírica en Alicante (GOYO, AMA)

      

Manuel Baeza (1911-1986), autodidacta con una amplia formación que le venía del taller de orfebrería familiar; fue pintor, ilustrador, ceramista, profesor de la Escuela Sindical de Bellas Artes, autor de carteles, murales, vidrieras y mosaicos. Ejerció con éxito su arte mediterráneo, gentil y decorativo, clasicista y moderno a la vez, siendo seleccionado por D´Ors para su Salón de los Once en 1951 (SÁNCHEZ, CAM)

             

Melchor Aracil (1906-1966), participó en la construcción de hogueras, realizó el cartel de 1936 y realizó dibujos propagandísticos en la Guerra. En los cuarenta este valioso artista sin fortuna reemprende su pintura, con escenas de niños, retratos, composiciones con barcas y paisajes alicantinos (SÁNCHEZ, AMA)

        

José Pérezgil (1918-1998), estudió en San Fernando y estuvo vinculado desde joven como otros artistas plásticos, al mundo de las Hogueras. De su faceta pictórica recordamos, especialmente, sus vigorosos paisajes (ARJONES; DIARIO INFORMACIÓN)

            

Manuel González Santana (1904-1994) fue autor de dibujos publicados durante la guerra que ya han adquirido un caracter de documento historico. Su pintura postimpresionista, construída como un concierto cromático, interpreta los objetos y los paisajes de los alrededores de Alicante a través de un filtro de armonía y equilibrio (DIARIO INFORMACIÓN)

        

Y, como no, nuestro gran pintor; hijo predilecto de Alicante y autor de una obra sólida y amable que reconstruye el folklore, las fiestas y los tipos populares. De él, como no, hablaremos largo y tendido la semana próxima en la campaña «Ser Alicantino duele… ¡¡en el más allá!!».

Fuente:

MEMORIA GRÁFICA DE ALICANTE Y COMARCA

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Ateneo de Alicante. Emilio Varela, Eduardo Irles, Francisco Guardiola, Daniel Bañuls y Francklin Albricias, comparten experiencias. Estamos en 1929
          
Nos contaba el historiador D. Francisco Moreno Sáez, hace ya algunos años, que a finales del siglo XIX existieron en Alicante algunas sociedades de tipo literario, que se agrupaban en torno a algunos mecenas aficionados a los versos. Era frecuente que publicaran revistas de escasa duración y celebraran sesiones poéticas que, en el fondo, no pasaban de mera ocasión de ocio para la buena sociedad. 
               
Algunas décadas después, ya en los inicios del siglo XX, se reunían intelectuales y artistas en sociedades como el “Círculo de Bellas Artes”, el “Ateneo Benaluense” o la “Sociedad de Escritores y Artistas” e incluso en 1903 se fundó un “Ateneo Científico y Literario”. Además, había que reseñar la existencia de una cultura popular, ligada al Centro Obrero y a la Casa del Pueblo, a los barrios o a ideologías “heterodoxas”, como las que animaban el «Centro Antiflamenquista Cultural»,  que tenía en el escritor Eugenio Noel su norte y guía.
            
En el Ateneo, vemos a Ángel Pascual Devesa, Eliseo Gómez Serrano, Carlos Carbonell, Hernández Catá, Rodríguez Albert, Felix Lorenzo «Heliófilo» y Pepe Juan (Sánchez, AMA)
                       
Sin embargo,  la primera entidad cultural alicantina de profunda influencia en la ciudad fue el Ateneo, creado en 1923. En su local de la Explanada se reunían artistas y literatos, se celebraban conferencias de intelectuales como Rafael Altamira, Margarita Xirgu, Miguel de Unamuno, Rafael Alberti, Miguel Hernández, Gómez de la Serna, Jiménez de Asúa y Luis Cernuda, conciertos diversos y exposiciones de Emilio Varela, Ramón Gaya o Heliodoro Guillén. En definitiva, el Ateno constituyó el centro neurálgico de la cultura progresista alicantina hasta el estallido de la Guerra Civil, época en que se instaló en la mansión de los marqueses del Bosch.
        
Sus impulsores –Gastón Castelló, Antonio Blanca, José Juan Pérez, José Sánchez Bohorquez- organizaron la actividad que llevaron a cabo “Altavoz del Frente” y la “Alianza de Intelectuales Antifranquistas”. Este claro alineamiento de los intelectuales alicantinos con la causa de la República y la represión que siguió a la victoria franquista explican las escasas actividades culturales existentes en los años cuarenta, aunque reaparecieron los Juegos Florales y los certámenes literarios en honor a santos y patronas. Hubo, además, conferencias asiladas de jerarcas del régimen como García Sanchíz, Vallejo Nájera, Eugenio Montes o Corts Grau, alguna exposición de pintura y escultura, y poco más.
             
Dibujo de Melchor Aracil que representa la sede de «Altavoz del Frente»
                  
En los años cincuenta, la cultura alicantina mostró una mayor vitalidad gracias  a la creación del Instituto de Estudios Alicantinos y a la labor cultural desarrollada desde la Caja de Ahorros del Sureste y su biblioteca “Gabriel Miró”. Además, continuaron los Juegos Florales, las “Alforjas para la poesía” y Fiestas de la Primavera, que eran ocasión para que las jóvenes alicantinas se pusiesen de largo y algunos poetas locales hiciese sus primeras o segundas armas. 
      
Desaparecida por decreto la cultura obrera de años anteriores, reducidas las llamadas Culturales de los barrios a entidades que apenas se ocupaban del deporte, casi siempre de mesa, la vida cultural de la ciudad quedó reducida a las conferencias, conciertos y exposiciones que organizaba la Caja de Ahorros y a la creación por el Ayuntamiento de unos Premios de teatro, novela y música, dedicados respectivamente a Carlos Arniches, Gabriel Miró y Oscar Esplá que, por desgracia, no llegaban a conocimiento y disfrute de los ciudadanos.
          
Exposición de pintura y escultura en la Diputación Provincial. 1943 (Sánchez, AMA)
              
Ya a mediados de los años sesenta, surgirían algunas entidades culturales que propondrían otra cultura, en clara oposición al régimen:  el Club de Amigos de la Unesco en Alicante y Mutxamel, el cine-club Chaplín, el Club Juventud de Xixona, varios grupos de teatro, cantantes “de protesta” o de la “nova cançó” que, en casi todas las localidades de la comarca, lucharon a brazo partido contra la censura franquista, por una cultura abierta al mundo y comprometida. 
          
La apertura, en 1974, del Aula de Cultura de la Caja de Ahorros del Sureste supondría un símbolo, ya en la transición, de la eclosión de neuvos aires culturales en la ciudad.
           
Los Juegos Florales eran ocasión para la presentación en sociedad de los jóvenes de las clases altas, a base de viejas retóricas a la Fe, el Amor y el Trabajo. Además, eran utilizados para celebrar grandes banquetes y galas en el Casino o en el Club de Regatas (Hermanos García, AMA)
         
D. Agatángelo Soler, en la presentación del Premio Oscar Esplá, en 1960 (Sánchez, AMA)
            
Veredicto del Premio Gabriel Miró de 1956. Entre los periodistas, vemos al gran Vicente Ramos e Isidro Vidal (Eugenio Bañón, AMA)
         
Celebración de una «Antología de la Zarzuela» en el Palacio Municipal. Años sesenta. (Ángel García, AMA)
               
Vicente Aleixandre, en 1952, durante una visita a Alicante. También vemos a Antonio Ramos Carratalá, Manuel Molina o Vicente Ramos (Sánchez, BGM)
         
José Hierro, en una conferencia en el Aula de Cultura de la Caja de Ahorros del Sureste. 1954 (Sánchez, AMA)
       
Camilo José Cela, en una conferencia. (Sánchez, AMA)
               
Homenaje a Gabriel Miró en 1966. El busto presidía la biblioteca que llevaba su nombre (Sánchez, AMA)
        
Inauguración del Aula de Cultura de la Caja de Ahorros de Alicante y Murcia, en 1974 (Ángel García, BGM)
      
El grupo «Qué dirán de nosaltres!», de Xixona, criticó a la sociedad de los años 70, con letras «escandalosas» y «en valenciano» (Josep Mateo)
          
Visita a Alicante del escultor Oteiza, en 1972. Junto a él, José Beviá y el alcalde, Ramón Malluguiza (Ángel García, AMA)
Fuente:
MORENO SÁEZ, Francisco.
«La cultura»; Memoria Gráfica de Alicante y Comarca. 
Diario Información

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Artículo de Víctor Manuel GALÁN TENDERO.

Estatua de Jaime I en la Plaza de Alfonso el Magnánimo de Valencia, obra de Agapit Vallmitjana.
(Imagen extraída de Wikipedia)

Un gran rey, una crónica excepcional.

Queda fuera de toda duda que Jaime I fue uno de los grandes reyes de la Hispania medieval. Sobrevivió a una complicadísima minoría de edad, impuso el orden en Cataluña y Aragón, conquistó Mallorca y Valencia a los musulmanes, organizó sus nuevos dominios, dictó leyes que perduraron hasta la Guerra de Sucesión a comienzos del XVIII, midió sus fuerzas con Castilla, se condujo con prudencia con Francia, coqueteó con la Cruzada a Tierra Santa, y dictó la crónica de sus hechos, el “Llibre dels feits”.

Tal obra atesora un acrecido valor histórico, ya que permite conocer en primera persona la visión que Jaime I tuvo de sí mismo y de los principales acontecimientos de su dilatado reinado (1213-1276). Su visión no es ingenua, aunque la mentalidad medieval nos la parezca, sino calculada e interesada. Supo refutar a aquellos que se burlaban de las circunstancias de su nacimiento y de su abandono de la empresa occitana. Proyectó con éxito su imagen de señor leal a los compromisos y buen guerrero frente a un Alfonso el Sabio enfrascado en ambiciosas obras historiográficas y jurídicas y aspirante al Imperio. Los méritos consignados en el “Llibre” lo convertían en el verdadero emperador de Hispania sin necesidad de formulismos y honores a cuestionar.

Con tales premisas la inserción de Alicante en su relato sobrepasó lo meramente fáctico al resaltar con lucimiento sus cualidades de rey caballero. El Alicante rememorado por don Jaime era un espejo de sus estudiadas virtudes. En nueve capítulos de su crónica lo mencionó:

C. 307. Proposición de Zayyan (Zaen) de intercambiar Alicante por Menorca.
C. 370. La caída de Penacadell en manos de Al-Azraq amenazaría la ruta hacia Alicante.
C. 377. Entrevista de Al-Azraq y Alfonso X en Alicante contra el rey de Aragón.
C. 415. En San Nicolás el rey ordena sus fuerzas para la campaña de Murcia.
C. 419. Llegada a Alicante de naves con provisiones para el ejército.
C. 420. En Alicante se negocia la rendición de los mudéjares ilicitanos.
C. 454. Se discute en nuestra entonces villa sobre una expedición a Almería.
C. 455. Jaime I deja una guarnición en Alicante a su marcha del reino de Murcia.
C. 506. Jaime I y Alfonso X se reunen en Alicante para tratar la política granadina.

De Laqant a Alicante.

Antes de la batalla de las Navas de Tolosa (1212) Laqant era una pequeña “madina” del imperio almohade, descrita sumariamente por el inquieto Al-Idrisi unos cincuenta años atrás. La dedicación marinera ya atraía con viveza a sus gentes. La descomposición de aquel imperio alentó a los conquistadores cristianos.

En 1243 el señor del “reino” de Murcia, en el que estaba incluída Laqant, acordó su vasallaje a Castilla, provocando la insurrección de los lugares contrarios a la sumisión. Laqant sería uno de ellos según se deduce por la escasa y dependiente población musulmana que permaneció aquí tras su incorporación a Castilla. De su conquista en concreto sabemos muy poco. Bendicho sostuvo que el patronazgo de San Nicolás rememoraría la entrada oficial de los cristianos un seis de diciembre, algo de lo que no estamos seguros en absoluto. Ibn Jaldún databa su conquista en el 1246 y Bendicho en el 1247, concediéndose su Fuero o ley municipal en 1252.

Entre 1252 y 1264 Alicante fue una villa castellana a promocionar, rodeada de importantes bolsas de población mudéjar. La colonización cristiana engendró problemas que terminaron en insurrección, secundada por la Granada nazarí. Las conquistas castellanas de Huelva a Murcia peligraron, y Alfonso X se vio obligado a pedir ayuda a su rival y suegro Jaime I, cuyos dominios llegaban al Barranc d´Aigües tras el tratado de Almizra (1244).

Don Jaime sofocó el levantamiento de los mudéjares murcianos sin contrapartidas territoriales, mereciendo la reprobación de muchos historiadores catalanes, si bien su campaña sentó las bases de la futura incorporación de Alicante a los dominios de los reyes de Aragón en 1296. En suma, Alicante se enclavaba en una de las más complejas encrucijadas de la Reconquista ibérica, como demuestran los posicionamientos de Jaime I.

(Supuesto retrato de Jaime I, pintado en 1427, que se encuentra en el Museu Nacional d’Art de Catalunya)

Un señor respetuoso de los acuerdos.

En las Navidades de 1272 en Tarazona Jaime I aconsejó a su yerno Alfonso X que respetara los acuerdos establecidos. Su poder como conde de Barcelona y príncipe de Cataluña reposaba en el acatamiento de los convenios feudales, posibilitando una autoridad no tan reconocida en el vecino Aragón. En la conquista de Valencia la firma de convenios o pactos con no escasas comunidades islámicas le permitió ampliar sus dominios sin acrecentar en demasía la fuerza de sus barones y economizar la acción militar. Tenía buenos motivos para respetarlos.

Los reyes aragoneses suscribieron con los castellanos en Tudillén (1151) y en Cazola (1179) acuerdos contra Navarra y de reparto de las conquistas de Al-Andalus, impregnados de reconocimiento vasallático a Castilla. En Cazola Alfonso II de Aragón entregó la conquista de Murcia a Alfonso VIII de Castilla a cambio de la exoneración de tal vasallaje. Los aragoneses y los catalanes no deseaban verse subordinados a la superior autoridad de un emperador hispánico radicado en Castilla-León, y Jaime I no cedió un ápice ante las pretensiones de un Alfonso el Sabio que llegó a aspirar al mismo trono del Sacro Imperio Romano Germánico. Su Crónica impugnaría tales pretensiones y le atribuiría la superioridad moral entre los monarcas de Hispania.

Con astucia don Jaime contrapuso en su “Llibre” su respeto hacia lo convenido en Cazola, no aceptando de Zayyan el castillo de Alicante a cambio del gobierno de Menorca (vasalla del aragonés), con la felonía del entonces infante don Alfonso, deseoso de hacerse con el dominio de Játiva por sus vinculaciones con la Murcia musulmana. Tal conflicto de intereses pudo ocasionar una guerra entre ambos, que se evitó con la firma de un nuevo convenio, el tratado de Almizra (1244).

Un nuevo juego de contraposiciones encontramos entre la amistosa acogida dispensada por Alfonso X a Al-Azraq en Alicante (calificada de maliciosa y poco fundamentada por Manuel González) y la brava y generosa respuesta del Conquistador ante la insurrección de los mudéjares murcianos. En este caso como en el anterior Alicante se convierte en un claro ejemplo de la superioridad moral de don Jaime, bien resaltada por las armas de su astuta propaganda.
Un guerrero sagaz y experimentado.

Entre las cualidades de un monarca del siglo XIII tenían que figurar las del guerrero, algo que Jaime I demostró con creces a lo largo de su vida. El 21 de noviembre de 1265 dictó en San Nicolás las normas a seguir por sus tropas en la campaña contra los mudéjares murcianos. En la Crónica Alicante es el lugar donde el estratega planea con acierto, aleccionando a propios y extraños.

En esta controvertida campaña el rey veló por la cohesión de sus tropas para evitar incidentes indeseados con castellanos y mudéjares. Los guerreros no atacarían sin su orden expresa, acudirían a la alerta a la voz de “via fora”, extremarían las precauciones nocturnas (protegiendo en todo momento al rey), y mantendrían la concordia entre sí. Toda contravención sería juzgada como traición.

En Alicante se robusteció su formación militar, avanzando en columna sin dispersarse en contingentes más pequeños, susceptibles de ser emboscados en combates secundarios. Este despliegue táctico se asemejaba al de los cruzados en Arsuf bajo Corazón de León (1191), divididos en grandes “batallas”, aunque la hueste de don Jaime se articulaba en compañías o unidades de dimensiones variables comandadas por un guerrero veterano.

Las disputas por el reparto del botín corroían sin piedad el compañerismo de armas, y el rey nombró dos caballeros para juzgar estos pleitos. El variopinto botín de las cabalgadas (objetos, animales y personas) era subastado por los cuadrilleros, distribuyendo su fruto entre los miembros de su cuadrilla atendiendo a su rango, condición, aportación a la expedición, actuación en combate, pérdidas y heridas. Tal sistema se mantuvo con ciertas variantes hasta 1369, cuando un condestable se encargara en la Corona de Aragón de tales juicios.

La campaña murciana (noviembre de 1265-marzo de 1266) resultó un completo éxito militar, y don Jaime no perdió oportunidad para aleccionar en Alicante a sus hijos. Su modesto espíritu de sacrificio, alejado del de sus impetuosos días de juventud, les imposibilitaría cabalgar contra la granadina Almería en breve tiempo, aprovechando la ocasión. No hemos de pasar por alto que el brillante conquistador omitió en su Crónica la valiosa actuación de su hijo don Pedro, llegado a Alicante a finales de agosto de 1265 para combatir a los mudéjares alzados, preparando convenientemente el terreno.

(Retrato de Jaime I, por Manuel Aguirre y Monsalbe)
(Imagen extraída de Wikipedia)


Una figura patriarcal.

La afortunada experiencia militar y política del rey le permitió asumir un acusado tono y papel patriarcalista en circunstancias difíciles, convenientemente resaltadas en el “Llibre”, ante su familia natural y política, en especial frente a su yerno Alfonso X. En 1271 no perdió oportunidad de aleccionarlo sobre política granadina y conducta pública en un encuentro en Alicante. El castellano se había casado con su hija doña Violante en 1249, de la que tuvo cinco varones y seis hijas. Sus ruegos le obligaron a luchar contra los mudéjares murcianos, según un emotivo pasaje de su Crónica. Quizá no fuera emperador de Hispania, pero sí el patriarca de sus reyes en su relato.

De doña Violante la tradición alicantina nos ha regalado el cuentecillo de su excepcional embarazo, conseguido en el Pla de Bon Repós a punto de ser repudiada. Tal dicha le haría exclamar la famosa “Beneïda siga la terra d´Alacant!”, consignada hoy en día en la placa municipal de la calle doña Violante, en la falda noreste del Benacantil. Aunque la frase nos llene de orgullo a los alicantinos, máxime si somos del Pla, no debemos olvidar que pende de una noticia errónea del obispo de Burgos don Gonzalo de la Hinojosa, que en su Historia hasta 1288 dialogada sostuvo que la llegada a la corte castellana de la princesa Cristina de Noruega se debió al deseo de Alfonso X de repudiar a la esteril Violante. La realidad era que la hija del Conquistador ya había alumbrado descendencia, pretendiendo su regio esposo casar a Cristina con uno de sus hermanos para fortalecer las relaciones entre Castilla y Noruega de cara a la consecución del título imperial. Pese a todo la hija de Jaime I ha entrado a formar parte de nuestras tradiciones con luz propia.

Alicante, punto estratégico mediterráneo.

Además de realzar las cualidades del Conquistador a través de sus hazañas o hechos, su Crónica nos ofrece una visión más objetiva de Alicante. Ante todo era un valioso puerto, enlazado con la avanzada Cocentaina, por donde aprovisionar a sus tropas durante la campaña murciana. Por fuentes cancillerescas sabemos que don Jaime contrajo importantes deudas con el sacristán de Lérida Jaime de Roca, con Ramón de Cervera, Geraldo de Cambafort, Simonet de Modulo y Conrado de Junta por la adquisición de víveres. Los cien caballeros establecidos en Alicante a su marcha en 1266, capitaneados por don Artal de Luna y don Eiximén de Urrea, dispusieron de raciones para cinco meses, llegando a vender hasta 30.000 soldadas, ejemplo de maridaje entre actividad comercial y política.

Alicante era la antesala de nuevas conquistas aragonesas, acreditándolo la referencia a Almería, que sería atacada infructuosamente por Jaime II en 1309. La prudencia de Jaime I vedaría la posesión de Alicante durante su reinado, pero no en el de su nieto Jaime II. Era una presa demasiado tentadora en la permeable frontera valenciana entre Aragón y Castilla, algo perfectamente consignado en la Crónica del Conquistador.

Fuentes y bibliografía.

BENDICHO, V., Chrónica de la muy ilustre, noble y leal ciudad de Alicante (edición de Mª. L. Cabanes), 4 vols., Alicante, 1991.
BURNS, R. I., Jaume I i els valencians del s. XIII, Valencia, 1981.
CINGOLANI, S. M., La memòria dels reis. Les quatre grans cròniques i la historiografia catalana, des del segle X fins al XIV, Barcelona, 2007.
GONZÁLEZ, M., Alfonso X el Sabio, Barcelona, 2004.
JAIME I, Crònica o Llibre dels feits, Barcelona, 1994.
MARTÍNEZ ORTIZ, J., Alicante y su territorio en la época de Jaime I de Aragón, Alicante, 1993.
SOLDEVILA, F., Jaume I el Conqueridor, Barcelona, 2008.

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        Monasterio de El Escorial
                    
A última hora de la tarde del domingo 25 de Octubre, recibimos por correo urgente certificado,  una carta desde el Real Sitio de San Lorenzo del Escorial (Madrid) en relación al artículo publicado por la Asociación Cultural Alicante Vivo sobre el título de Alcaldesa Honoraria y Perpetua de la Virgen del Remedio.
     
A continuación, transcribimos de forma íntegra la misiva, firmada por la Reina Dª Victoria Eugenia de Battenberg, por creer de gran importancia para nuestros lectores y amigos. Por descontado, también la hemos puesto en conocimiento de nuestras autoridades pertinentes:

                         

Carta Real recibida el domingo 

            

A la Muy Ilustre y Siempre Fiel Ciudad de Alicante:
Alicantinos, desde éste mi retiro eterno en San Lorenzo del Escorial no puedo más que mostrar mi regia indignación y sorpresa por un artículo periodístico publicado en lo que creo que es un diario de tirada provincial llamado «Blog Alicante Vivo» y que ha llegado a mi poder gracias a una compatriota vuestra que lo depositó sobre mi lecho eterno.
En el mencionado artículo, redactado por los periodistas D. Juan José Amores y D. Alfredo Campello, se menciona que la actual alcaldesa de Alicante, la Excelentísima Sña Dª Sonia Castedo, del Partido Conservador, no sería la primera en ostentar dicho cargo. Por el contrario,  el puesto recaería  por vez primera en mi amadísima Patrona de Alicante, la Santísima Virgen del Remedio, a la que tuve el gusto de conocer en mis muchas visitas a la ciudad levantina.
Dicho diario comete un grave error al afirmar la citada aseveración;  la Patrona de Alicante tampoco es la primera mujer alcaldesa. Sin duda, el rancio antialicantinismo (Fú-Fú),  el sindicalismo tan despiadado, y el republicanismo catalanista de dicho diario, juegan en contra de la veracidad histórica, puesto que la primera Alcaldesa de vuestra Muy Ilustre y Siempre Fiel Ciudad de Alicante es mi Regia Persona

 

Vamos…. Yo Misma.
Al Rey y yo nos llena de orgullo y satisfacción ostentar la alcaldía de la Muy Ilustre y S… de Alicante, desde el 14 de enero de 1925, fecha en la que  el Excelentísimo Señor D. Julio Suárez-Llanos Sánchez,  nos otorgó tan merecida distinción por nuestro cumplimiento del deber y nuestro amor a la Patria.

También ahora creo cumplir el deber que me dicta el amor a la Patria al pedirle al diario Blog Alicante Vivo que rectifique dicho artículo lleno de insidiosas mentiras y manipulaciones puesto que Yo la Reina no renuncio a ninguno de mis derechos, porque más que míos son depósito de la Historia, de cuya custodia ha de pedirme algún día cuenta rigurosa.

¡¡Adelante Alicante y su Alcaldesa (o sea YO)!!

Dado en San Lorenzo del Escorial, a 25 de octubre de 2009

En conclusión, que a la ínclita Dña. Sonia Castedo Ramos debemos trasladarla, por lógica histórica, al tercer puesto o Medalla de Bronce; y a la Virgen del Remedio al segundo, pues empuja por detrás y con mucha fuerza (con perdón) Su Majestad la Reina Dña. Victoria Eugenia.
             
Y será mejor que NO sigamos echando mano de nuestra Hemeroteca, pues a este ritmo puede acabar la actual (tercera) Alcaldesa de Alicante  en el quinto p….. puesto
                    
ALFREDO CAMPELLO y JUAN JOSÉ AMORES
ALICANTE VIVO